Grados de significación del adjetivo

Se trata de un concepto semántico que logra por medio de recursos sintácticos, morfológicos o léxicos. Solo los adjetivos calificativos tienen grado. Los grados de significación son tres: positivo, comparativo y superlativo.

Los adjetivos que denotan cualidad cotejada con la de otro ser u objeto están en grado positivo (como mejor, peor, etc.). Los que denotan la cualidad coteja con la de otro ser u objeto están en grado comparativo (como mejor, peor, etc.). Los que denotan la cualidad en grado sumo son superlativos (como óptimo, pésimo, etc.)

Hemos dicho que el grado puede obtenerse mediante procedimientos sintácticos (por medio de una construcción: por ejemplo, mas alto que), morfológicos (por medio de la adicción de un sufijo: por ejemplo, buenísimo), o bien por medio de un procedimiento léxico (si se cambia  una palabra por otra para significar el grado: por ejemplo, optimo, superlativo de bueno).

El comparativo

Normalmente, el comparativo de los adjetivos se obtiene por medio de procedimientos sintácticos, que varían según se quiera conseguir el comparativo de superioridad, de igualdad o de inferioridad.

El comparativo de superioridad se forma con el adverbio más, seguido del adjetivo en grado positivo, seguido del nexo comparativo que. Así, el comparativo de superioridad de manso es «más manso que».

El comparativo de igualdad se forma por medio del adverbio tan, seguido del adjetivo en grado positivo, seguido del nexo comparativo como. Así, el comparativo de igualdad de manso es «tan manso como».

El comparativo de inferioridad se forma por medio del adverbio menos, seguido del adjetivo en grado positivo, seguido del nexo comparativo que. Por lo tanto, del comparativo de inferioridad del adjetivo manso es «menos manso que».

El superlativo

El superlativo de los  adjetivos se forma añadiendo el sufijo ­ísimo a su raíz. Así, lindo hace lindísimo, suave hace suavísimo, manso hace mansísimo.

Hay adjetivos que forman su superlativo añadiendo este sufijo a la raíz latina y no a la castellana: así, fiel hace fidelísimo (de fidelidad), amable hace amabilísimo (de amabilis), etc.

Otros adjetivos forman su superlativo mediante la adición del sufijo-érrimo (que se agrega a la raíz latina): así, pobre hace paupérrimo (pero también pobrísimo, de manera regular), miserable hace misérrimo (de miser), saludable hace salubérrimo, célebre hace celebérrimo, etcétera.

El superlativo puede ser:

a) absoluto (donde se indica el grado sumo de la calidad), que, según se ha visto, se forma mediante adición de los sufijos – ísimo o érrimo;

Lu ilustración muestra un ejemplo de la formación de los comparativos de superioridad y de inferioridad: «EI muchacho de la derecha cs el más alto y el del centro el más bajo».

b) relativo, si indica el grado máximo o máximo con respecto a otros que poseen la misma cualidad.

El superlativo relativo se expresa por medro del artículo, seguido del adverbio más o menos seguido del adjetivo en grado positivo, seguido de un  complemento encabezado por las preposiciones de o entre: «el más alto de»_ «el más alto entre».

Comparativos y superlativos irregulares

El cuadro que sigue establece una relación entre comparativos y superlativos irregulares.

Positivo

Comparativo

Superlativo

bueno
malo
grande
pequeño
alto
bajo
mejor
peor
mayor
menor
superior
inferior
óptimo
pésimo
máximo
mínimo
supremo o sumo
íntimo

A continuación, se forman los comparativos y superlativos posibles del adjetivo pobre.

Positivo

Comparativo

Superlativo

pobre

de igualdad:
tan pobre como
de superioridad:
mas pobre que
de inferioridad:
menos pobre que
absoluto:
pobrísimo o
paupérrimo
relativo:
el mas pobre de
el mas pobre entre