Fecundación

Durante la ovulación, el óvulo penetra en la trompa, rodeado de las 3 000-4 000 células de granulosa que forman la corona radiante.

Los espermatozoos, por quimiotropismo, circundan la corona radiante, que se disuelve, y se adhieren a la membrana pelúcida para atravesarla, pero sólo un espermatozoo logra introducirse entero y acercarse al núcleo femenino para participar con este en la formación del nuevo individuo, aportando cada uno la mitad del número cromosómico y, con ello, el patrimonio hereditario.

La nutrición del nuevo ser se realiza a expensas del citoplasma del óvulo. Una vez fecundado el óvulo, comienzan a producirse la serie de transformaciones generales que configuran el desarrollo embrionario.