Pulmones y pleuras

Son dos órganos simétricos, voluminosos y cónicos, que ocupan las zonas laterales del tórax. El espacio comprendido entre ambos pulmones se llama mediastino, y alberga el corazón y los grandes vasos, la tráquea, los bronquios principales y el esófago. El pulmón derecho presenta tres lóbulos (superior, medio e inferior) y el izquierdo dos (superior e inferior) divididos cada uno en lobulillos. Los bronquios, por sucesivas divisiones del árbol bronquial dentro del pulmón, culminan en los bronquíolos respiratorios.

Existen 10-15 ácinos o dilataciones pulmonares por cada lobulillo. De ellos parten los conductos alveolares que llegan a los bronquíolos. Las paredes de los alvéolos están recubiertas de un epitelio especializado en favorecer la función respiratoria y provistas de capilares sanguíneos, donde se produce el intercambio gaseoso entre la sangre y el aire.

La sangre que llega a la red capilar, denominada sangre venosa, proviene de la arteria pulmonar, y la que sale de los capilares tras la oxigenación de la misma se denomina arterial (donde vuelve a oxigenarse).

Pleuras

Son membranas protectoras que revisten los pulmones. Cada pleura presenta una capa visceral, en contacto con el pulmón, y una capa parietal, que tapiza la pared torácica; entre las dos pleuras está la cavidad pleural.