Astéridas

La mayoría son plantas simpétalas, algunas de flores radiadas, y otras muchas, bilaterales. Los estambres, que alternan con los lóbulos de la corola, suelen soldarse a ella. Mientras que el perianto y el androceo suelen ser pentámeros, el gineceo consta, por lo común, de dos carpelos soldados entre sí, ya súperos, ya ínferos. La mayoría de astéridas son hierbas o arbustos, menos común son los árboles.

El género tipo, Logania, pertenece al grupo de las que tiene fruto capsular, y comprende una veitena de especies, en su mayoría hierbas de Australia. Fruto en cápsula tiene también el género Gelsemium, con dos especies nada más. G. sempervirens, de México, Florida y Virginia (EE UU) es el gelsemio.

El género Buddleia, con un centenar de especies, es el más rico de la familia. Son estas arbustivas o arborescentes rara vez herbáceas, con vestidura de pelos estrellados, entremezclados con otros glandulíferos. Las flores se disponen en inflorescencias acabezueladas unas veces, por ejemplo, en la llamada salvia de bolitas, Buddleia perfoliata, de México.

Buddleia perfoliata

Las gencianas crecen en gran número y en las proximidades del ecuador. Para la medicina, la especie más importante es la genciana propiamente dicha (Gentiana lutea), planta vivaz, de gruesa raíz y anchas hojas, hasta de 1 m de altura, con las flores en falsos verticilos axilares, amarillas y de corola rotácea. Se ubica en los Pirineos.

Los quinos pertenecen al género Cinchona, y son árboles de hojas opuestas, elípticas o lanceoladas, pecioladas, flores rosadas o amarillentas, en grandes panículas, y fruto capsular y pluriseminado. 40 especies se ubican en las faldas orientales de los Andes, la mayoría entre los 1500 2500 m de altitud, en las altas cuencas del Amazonas y del Orinoco. De norte a sur se hallan en Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú y Bolivia.

El cafeto

El cafeto crece salvaje en los montes de África oriental, en Etiopía. Es un arbolillo de elegante porte, follaje perenne, verdinegro y nítido, flores blancas, aromáticas, en breves ramilletes axilares, y frutos redondos, rojos como cerezas, que acaban por tornarse de un negro azulado; cada uno de estos frutos, abayados, y con el endocarpo apergaminado, lleva una pareja de semillas planoconvexas, con un surco a lo largo de la cara plana, que constituyen el café.

La adelfa (Nerium oleander) es una planta venenosa; si por descuido, comen las bestias, sucumben.