Conservación de las especies

Se han efectuado algunos esfuerzos privados y gubernamentales dirigidos a salvar especies en vía de extinción. Una propuesta inmediata es la protección de especies a través de la legislación. Además, son importantes los esfuerzos que se realizan a través de los convenios internacionales, de las publicaciones de ‘listas rojas’ o catálogos de las especies amenazadas, de diferentes proyectos como ARTEMIS (creación de un banco de semillas para plantas en peligro), ZEPAS (Zonas de Especial Protección para las Aves); así como los acuerdos que se obtienen en los diferentes congresos y cumbres, tanto a escala internacional como nacional.

Los esfuerzos internacionales se concretan en la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Flora y Fauna Silvestres (CITES), ratificada por más de 150 países. Su propósito es reducir la explotación de éstas mediante la regulación y restricción de su comercio. Sin embargo, en algunos países la eficacia de estas leyes depende de la aplicación y apoyo que reciben de la población y de los tribunales.

Debido a que su aplicación no es totalmente estricta, a la negligencia de algunos segmentos de la sociedad que consienten el comercio con especies amenazadas, y a que las actividades de cazadores furtivos y traficantes sin escrúpulos facilitan este comercio, el futuro de muchas especies, a pesar de su protección legal, es incierto.

Los esfuerzos dirigidos a la conservación de especies también incluyen la repoblación de la naturaleza con animales en edad de procrear, bien para restablecer su número (como en el caso del halcón peregrino) o para aumentar la población natural (como en el caso de la grulla cantora). Gracias a la reproducción en cautividad, por ejemplo, el número de ejemplares de cóndor de California se ha elevado de 27 en 1987 a unos 150 en 2000.

Otro proyecto implica la determinación de los hábitats críticos que se deben conservar para las especies amenazadas. Su protección puede llevarse a cabo mediante el establecimiento de reservas, aunque su valor está limitado por el efecto isla. Las objeciones planteadas por algunos grupos con intereses particulares hacen que la conservación de zonas para las especies amenazadas sea también difícil.

Áreas naturales protegidas en américa latina

PaísÁrea naturalCaracterísticas
ArgentinaLos GlaciaresEn los Andes australes. Formación de altas montañas.
Argentina-BrasilIguazúEn la cuenca del Paraná. Riqueza hídrica (cataratas).
BoliviaSerranía HuanchacaEn la Amazonia. Selva húmeda y sabana. Riqueza faunística
ColombiaSierra Nevada de Santa MartaEn el vertiente caribeña. Globalidad biótica
ColombiaSerranía de la MacarenaConfluencia Orinoquia-amazonia-Guayana. Ricas flores y fauna.
Costa RicaChirripóMacizo volcánico. Turberas de altura.
Costa Rica-PanamáLa AmistadMacizo cubierto de selva tropical. Diversidad biológica.
ChileTorres del PaineEn el extremo austral. Bosques de hayas antárticas
EcuadorGalápagosEn el Pacífico. Numerosas especies endémicas.
EcuadorSangayEn los Andes. Cono volcánico de prolongada actividad.
GuatemalaTikalEn el Petén. Selva tropical y refugio de fauna.
HondurasRío plátanoEn la vertiente atlántica. Bosques y ríos.
MéxicoIztaccíhuatl-PopocatépetlEn el Anáhuac. Macizos volcánicos.
PanamáDariénEn la base sur del istmo centroamericano. Manglares.
ParaguayDefensores del ChacoEn el Chaco. Refugio del pecarí.
PerúHuascaránEn los Andes. Macizo con 27 nevados de más de 6.000 metros.
PerúManuEn los Andes y la Amazonia. Ricas flores  y fauna.
UruguaySanta TeresaEn la costa atlántica. Dunas y playas.
VenezuelaCanaimaEn la Guayana. Tepuis (Auyán-tepui) y cataratas (salto Ángel).